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Directora del CNCR elegida miembro del Consejo de ICCROM

En el marco de la 28ª Asamblea General de ICCROM, las delegaciones de 89 Estados miembros, compuestas por diplomáticos y especialistas, escucharon los informes sobre la ejecución del programa 2012- 2013. También discutieron las actividades y el presupuesto para el periodo 2014- 2015 y galardonaron con el prestigioso Premio ICCROM al profesor y experto en conservación Lu Zhou por su destacada contribución en China y en la región de Asia-Pacífico en general.

Mónica Bahamóndez, fue electa junto a 12 nuevos integrantes del Consejo del ICCROM (en español Centro Internacional de Estudios para la Conservación y la Restauración de los Bienes Culturales), entidad que cuenta con un total de 26 miembros elegidos por períodos de 4 años.

A fines de noviembre, en el marco de la 28ª Asamblea General de ICCROM se ha realizado esta elección de especialistas propuestos por sus diferentes países.


ICCROM es una organización intergubernamental (OIG) y un referente a nivel mundial en materia de conservación y restauración del patrimonio cultural, tanto mobiliario como inmobiliario. Esta entidad aparece a raíz de la 2ª Guerra Mundial, dentro del esfuerzo de reconstrucción y su sede se sitúa en Roma. Cabe destacar que Guillermo Joiko, fundador y primer director del CNCR, estudió en el Istituto Centrale del Restauro de esta ciudad. Asimismo el Centro Nacional de Conservación y Restauración es la contraparte de ICCROM en Chile. Con más de 130 Estados parte, esta institución depende para su funcionamiento y la gestión de sus programas del financiamiento que recibe de estos países, cuota que se establece en función de la realidad económica de cada miembro. Las actividades del ICCROM abarcan cinco áreas principales:

o La formación a través de cursos, materiales e instrumentos específicos.

o La difusión de información con el apoyo de la importante colección de su biblioteca y de sus archivos.

o La investigación, definiendo metodologías, criterios, normas técnicas y una ética comunes en materia de conservación y restauración.

o La cooperación, invitando a participar en sus actividades a diversas entidades profesionales e institucionales.

o La sensibilización del público con el apoyo de talleres y de material pedagógico.

Como muestra del compromiso y participación del CNCR en las actividades de ICCROM, en octubre de este año se implementó un curso preventivo de gestión de riesgos que pudieren afectar a los bienes culturales, en las dependencias del Centro Nacional de Conservación y Restauración. Profesionales de 8 países de Latinoamérica participaron en esta formación, acción que contó con el apoyo de la Dibam y de Ibermuseos. Esta iniciativa se inscribe en el programa LATAM, programa de ICCROM cuyo principio central es que tanto el contenido como las actividades cuenten prioritariamente con competencias y experiencias existentes en la región de América Latina y el Caribe, adaptadas a sus necesidades. En este marco se destaca la acción del CNCR y del INAH (Instituto Nacional de Antropología e Historia de México). En 2014 se coordinarán esfuerzos para la ejecución de un curso sobre la conservación de la piedra en este país.

Refiriéndose a su nominación, Mónica Bahamóndez destaca el reconocimiento que recibe Chile dentro del ICCROM como un socio comprometido y responsable, contando con una institucionalidad que permite asegurar la continuidad y garantizar un enfoque nacional en materia de conservación patrimonial. Se reconoce la experiencia técnica del CNCR tanto a nivel nacional como internacional. También señala el importante apoyo de Magdalena Krebs, Directora de Bibliotecas, Archivos y Museos (Dibam) y miembro del Consejo de ICCROM durante 8 años, cuya labor durante este período ha sido reconocida. Por último, observa que el respaldo de su amplia trayectoria en el campo de la conservación y la restauración ha sido clave en el resultado de esta elección.

En cuanto a sus prioridades, la directora del CNCR ve este cargo como una oportunidad para seguir fortaleciendo el programa LATAM, teniendo en cuenta los diferentes niveles de desarrollo en esta región. Por otra parte, considerando el número creciente de extranjeros y de representantes de entidades que no pertenecen necesariamente a la Dibam, que participan en actividades de capacitación de su institución, sería una oportunidad para dar un marco más formal y sistemático a esta participación. Destacando que el curso que tuvo lugar en Santiago este año fue esencialmente en español, considera que el poco conocimiento de idiomas y sobretodo del inglés representa un factor de aislamiento para los especialistas de América Latina. Es una realidad que tanto las ponencias como una gran parte de la literatura especializada a menudo no están disponibles en castellano.